miércoles, 30 de junio de 2010

Para Generación Y

Contadas veces puedo acceder a este blog y dejar algunas palabras. Estoy solo en un rincón de la isla viviendo una muerte diaria; palabras no tengo que contengan mi desilusión perpetua. No se hasta cuando va a ser esta desgracia que es vivir de esta manera, pero lo que sí se es que ninguna puerta se abre por arte de magia, y que aunque todas se abriesen de la noche a la mañana nos va a costar mucho levantar este país de las ruinas en que lo convirtió un solo hombre. No vale la pena, hermanos, seguir cagándonos la vida unos a otros: todos somos víctimas de este sistema y todos somos a la vez cómplices. ¿Es tan difícil darse cuenta de que todo esto esta creado a propósito? de que cada cosa que sucede ya podía haberse escrito desde antes, desde mucho antes...
Por los comentarios veo que muchos de uds están fuera de la isla. Los de aquí dentro supongo sean los mínimos, primero porque desde aquí este blog es solo accesible a través de túneles virtuales y segundo porque muy pocos se atreverían desde dentro a sacrificar una mísera conexión a Internet con tal de arriesgarse a dejar trazas en los servidores espías por donde irremediablemente pasan estas palabras.
Hermanos, hay un montón de cosas que todavía se pueden hacer centrándonos en ello; desgraciadamente ya el enemigo no es un hombre, el enemigo es este sistema que creó un hombre con todo el odio hacia la condición humana almacenado en sus entrañas, y el sistema somos todos, los que halan las cuerdas y los que nos movemos al compás de ellas siguiéndoles el juego. Los enemigos somos nosotros, los cubanos, que nos perdimos, hace mucho tiempo, el respeto.
Vamos a despertar, por Dios, vamos a centrarnos todos en algo que realmente funcione, no tengo mucho que ofrecer, soy solo un pedazo de vida que ya ha perdido hasta las ganas de vivir, pero mis manos, mi mente y mi sangre aun palpitan.
No sigamos permitiendo que nos roben el alma.

1 comentario:

  1. Sobreviviente, leo mucha desesperanza en sus artículos. No pierda sus ganas de vivir, mientras hay vida, hay esperanza. Las nuevas generaciones de Cubanos son la semilla que podrá sacar a flote la isla hermosa, hay que apoyarlos, desde adentro y desde afuera... la vida es cambio, y la vida es bella, mantenga la esperanza, asere.
    Mis cordiales saludos

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